La Iglesia Ortodoxa de Europa, presente en los cinco continentes es una iglesia ortodoxa que confiesa la misma fe que los ortodoxos griegos, rusos, rumanos, búlgaros, serbios, etc.
Sus dogmas, la teología y la fe no son diferentes de las de las Iglesias ortodoxas orientales. Ortodoxia significa la glorificación en la "verdadera fe".
Somos una Iglesia "Católica", como todas las iglesias ortodoxas y como la Iglesia romana.
"Catolicidad" significa en realidad "plenitud universal de la Verdad", a diferencia de cualquier limitación. Así pues, nuestra Iglesia esparcida por los 5 continentes, es también una Iglesia católica, Nuestra denominación como iglesia Cristiana Ortodoxa Argentina y Iglesia Cristiana del Paraguay , es decir, una iglesia local de acuerdo con el principio de unidad en la diversidad que se regula en la organización de las Iglesias Ortodoxas.
Así, según el mismo principio, nunca fue utilizado otro lenguaje para el culto que no sea la lengua materna de las personas de Argentina y Paraguay, sumando a la lengua materna el Idioma Nativo Guaraní, para las celebraciones litúrgicas, para los residentes del Paraguay y los Paraguayos inmigrados a la República de Argentina, enriqueciendo así la participación de los fieles, respetando la diversidad cultural para las celebraciones litúrgicas.
Así nuestra Iglesia Patriarcal la: "Iglesia Ortodoxa de Europa" , respeta las lenguas maternas en los países en donde esta se encuentra.
Esto se aplica para restaurar algunas de las prácticas litúrgicas locales específicas de Occidente, para dar testimonio de la riqueza de la vida y sentir en la fe Ortodoxa a quienes sintiendo este modo de vivir la Fe de Cristo estaban abandonados durante los últimos siglos al no poder acceder a la Santa Tradición Ortodoxa por desconocer las lenguas de Oriente o no ser inmigrantes de estos Países, y siendo Occidentales fueron desconocidos por las Iglesias orientales en el uso compatible con el integridad de la fe y de la tradición de la Iglesia indivisa del primer milenio ortodoxa y así ayudar a los fieles a ser más íntimamente conscientes de los misterios litúrgicos. Nuestra Iglesia Ortodoxa de Europa y sus Iglesias miembro esparcidas en los cinco continentes, ( bajo reconocimiento canónico) no es, como hemos dicho, un retorno a la vivencia arqueológica para un estado de vida existente a los siglos pasados siglos de la Iglesia pero SI, es la búsqueda del resurgimiento visible de una corriente que nunca ha dejado de manifestarse a través de diversas personas, que tienen su sentir y fe puestas de manifiesto y con el arduo deseo de vivir bajo el Patrimonio de la Iglesia indivisa y la Fe Tradicional Ortodoxa.
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